Metodología activa en el aula

El término gamificación es un anglicismo y su raíz proviene de la palabra game. Gamificar significa llevar el juego a ámbitos donde no es común, como la formación, los recursos humanos o el propio desempeño del trabajo

En el ámbito educativo, la gamificación, aparece como una de las herramientas innovadoras que ayudarán a la reconexión de los educadores, con los estudiantes.

Esta estrategia se caracteriza por la incorporación de elementos propios del juego, como metas, retos, recompensas, etc., para promover el interés, la creatividad, la colaboración y la sana competencia entre los participantes.

La gamificación permite relacionar la vida cotidiana del alumno con su proceso académico, desarrollando capacidades, competencias y actitudes que lo habiliten a actuar en diferentes situaciones y ambientes.

“La actividad gamificada no es solo jugar, es una actividad más de aprendizaje con una finalidad pedagógica que va más allá de la acción de motivar” (Molina, Ortiz y Montoro, 2017:4).

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